Los estucos
Lo que hoy llamamos “estucos venecianos” asociados a una técnica concreta de aplicación, que como concepto histórico no existe sino que es una vulgarización de cierto tipo de estucados que se realizaron en Venecia , tienen su origen en las técnicas de enlucidos decorativos desarrolladas en los albores del Renacimiento Veneciano (XV), probablemente como evolución de otros procesos como el del “gesso forte” (yeso fuerte), la técnica se llamaba “Spatolatto o Pastellone” y la fórmula se fundamentaba en yeso fino alabastro hemihidratado (yeso de construcción; el que a perdido el agua de cristalización por cocción), con cola animal (de piel de ternera) como aglutinante, pigmentos y agua. A esta mezcla, con la cual se aplicaban varios tendidos sobre el paramento, se le añadía en la última mano, la del “Spatolatto”, aceite de lino y una emulsión de cera.
Pertenecen al a familia de los llamados “estucos lustros” por lo tanto brillantes por definición y de evocación marmórea, con o sin veteados, en la mayoría de los casos.
Este y otros antiguos y nobles “lenguajes” decorativos parietales fueron recuperados para nuestro mundo, por el arquitecto véneto Carlo A. Scarpa a partir de 1955, pionero en introducir en una arquitectura vanguardista las técnicas artesanales venetas, junto al maestro Eugenio de Luiggi.
Los “estucos venecianos” que hoy fabricamos como nuestroVeneciano Clásico, tienen más que ver con evoluciones posteriores de esta técnica, aparejos finos e inertes (sin aglomerantes) de acabado. Algunos quedaron reseñados en viejos tratados como el del maestro Giacomo Querini di Venecia, publicado en 1889 y son derivaciones en algunos casos tal vez de la pintura a la encáustica.
Estos antiguos lenguajes son la conexión lógica entre artesanía y arte.
Debido a la profesionalización que en los últimos 15 años, se ha percibido en los talleres de aplicación de nuestro país, el fabricante especializado tiene que dar respuesta, en forma de productos concretos a dicha evolución, presentado variantes con diferentes características técnicas.
A esta especialización Coloris ha dado respuesta siguiendo su filosofía de trabajo: vinculación absoluta al mundo profesional, el mantenimiento del espíritu mineral de los estucos, intentar recrear fórmulas de época sustituyendo únicamente aquellos elementos químicos no aptos para la fabricación industrial, buscando también una cómoda puesta en obra, sin olvidarnos que existen otros elementos constructivos de cerramiento, levantamiento y enlucido de muros que antes no existían , sobre los cuales los materiales tienen que comportarse correctamente.
También presentamos una amplia paleta de colores basada tanto en el concepto tradicional como vanguardista.
Para cumplir con estos requisitos Coloris ofrece un abanico de materiales de interesante concepto técnico y estético.
VENECIANO CLÁSICO
Es un estuco mineral inerte es decir sin ningún tipo de aglomerante, de utilización interior, para la realización de enlucidos decorativos, con clara vocación marmórea, de mejor plasticidad en cuanto a la aplicación tal vez, que los venecianos a la cal, su aspecto final presenta unos “espatuleados o aguas” más marcadas que los basados en cal grasa, que quedan más difuminados. Presenta magnífica adherencia y transparencia ideal para hacer técnicas de bicolor”fresco sobre seco”, por su consistencia y endurecimiento rápido, también el mejor para la colocación de plantillas y sistemas de enmascarado. Como diferenciación comentar que este estuco puede proyectar a máquina, en sus primeras manos dando el acabado a llana.
VENECIANO A LA CAL
es un revestimiento mineral en base cal grasa de utilización interior, para realizar también enlucidos y composiciones decorativas (estucados lustrosos), de efecto marmóreo brillante, presenta buena plasticidad y profundidad. Se diferencia del Veneciano Clásico en que las “aguas” que presentan son menos definidas y del Veneciano a la Cal Cristal en que no es tan delgado, debido a que presenta en su formulación cargas más gruesas, permitiendo la aplicación de menos capas (enlucidos previos de estuco) o que el soporte no esté perfectamente preparado en cuanto a pequeñas irregularidades.
Este estuco es un híbrido entre el Veneciano Clásico y el Veneciano a la Cal Cristal, por lo tanto, los dibujos/ “aguas” y facilidad de aplicación se parecen al Veneciano Clásico, pero también adquiere el efecto abstracto propio de los compuestos de hidróxido cálcico puro o cal grasa.
VENECIANO A LA CAL CRISTAL
Se diferencia del Veneciano a la Cal en que las proporciones de cal son más elevadas y las cargas (polvo impalpable de mármol) más finas que en este último, dando lugar a unas “aguas “más difuminadas, notándose menos el “Spatolatto” (parche o golpe de llana) y consiguiéndose un brillo superior en el planchado final, pero necesita una superficie más “tersa” con pocas imperfecciones.
A estos estucos se los conoce en el mercado comúnmente como “grassello de calce”.
VENECIANO A RODILLO
Es un estuco mineral inerte (sin aglomerantes) al igual que el Veneciano Clásico que presenta buena plasticidad y cómoda puesta en obra, para conseguir bellos veteados, además de otros tipos de efectos según la técnica a emplear. El acabado vetado se basa en una antigua técnica de enlucido decorativo de origen itálico, llamada en algunos tratados “Marmoráceo”, que se basaba y se basa en crear bajo relieves para posteriormente rellenarlos con el mismo color del fondo o en un trabajo de policromía. Por lo tanto, son trabajos de evocación marmórea, aunque con estas técnicas se pueden conseguir efectos vanguardistas.