
Si existe en el mercado un tipo de revestimiento para el hogar moderno y a la vez resistente, este no es otro que el microhormigon. En efecto, este material es hoy día el preferido para muchos arquitectos y cada vez más, protagonista en revistas de decoración.
Este componente ha sido tradicionalmente empleado para los suelos de naves industriales y de locales comerciales por su gran resistencia, su gran carácter decorativo y su rápida aplicación.
Actualmente la utilización del microhormigon va más allá de estos usos comerciales o industriales dado que se apuesta, cada vez más, por su utilización en todo tipo de ambientes y para todo tipo de fines. Esta apuesta se debe a las numerosas ventajas que posee con respecto a otros materiales; por ejemplo, para su reparación, no necesitas hacer obra como el azulejo o el mármol, si no que con la aplicación de una pasta del mismo color conseguirás que quede totalmente nuevo ahorrando tiempo y dinero. Otra de las ventajas es su fácil mantenimiento y limpieza, donde puedes usar para ello un poco de detergente y agua. Otras acciones como el lacado o pulido son recomendables pero solo esporádicamente.
En el ámbito del hogar este material tiene multitud de usos. Desde su aplicación en cocinas, donde otorga un estilo muy moderno y vanguardista, hasta salones y recibidores donde puede traducir el espacio en algo mucho más acogedor. Asimismo al tratarse de un revestimiento impermeable lo hace excelente para baños y piscinas y zonas expuestas a humedad.
Del mismo modo, para otras zonas con mucho desgaste como por ejemplo terrazas o patios es muy recomendable, también, por su gran dureza y resistencia a agentes externos como la lluvia o la exposición solar.
Una idea que enlaza con esto es la posibilidad de que puedes aplicar este material en jardines y zonas verdes dando resultados realmente bonitos.
Por otro lado, este tipo de revestimiento te ofrece la posibilidad de emplearlo tanto para la restauración de paredes o suelos, convirtiéndolos en elementos mucho más duraderos, como para la restauración del mobiliario dada su naturaleza decorativa, su amplio abanico de tonalidades y su fácil combinación con otros materiales como el vidrio, la madera o metal, dando mucha más singularidad al lugar.